Cómo elegir el color de los estores de forma correcta

Comprar estores baratos acertando con su color y estilo plantea en ocasiones un desafío, al alcance sólo de expertos decoradores. Aunque este tipo de cortina garantiza un plus de privacidad, iluminación y aislamiento térmico, supone un riesgo para la decoración circundante, ya que una mala elección provocaría efectos discordantes y nada favorecedores.

 

Por esta razón, el color de los estores debe escogerse cuidadosamente y, en muchos casos, está condicionado por su entorno inmediato: el mobiliario, la tapicería o el color de las paredes. Estas últimas ofrecen una referencia útil para decantarse por unos estores frente a otros. Por ejemplo, las paredes de un verde pastel combinan con estores de tonos complementarios (naranja, amarillo, etcétera), mientras que las pintadas en blanco o beige admiten un mayor número de tonos para los estores que ‘vistan’ sus ventanas y puertas.

 

El uso y función que reciban los estores puede ser determinante en su elección. Así, los destinados a cuartos de baño deben combinar con el color y motivos ornamentales de los azulejos, el linóleo, etcétera. En caso de contener adornos geométricos, sería inapropiado comprar cortinas con lunares, flores u otros motivos difícilmente compatibles. Por idéntica razón, los dormitorios infantiles y juveniles requerirán estores de colores más vivos y dinámicos. En otras palabras, considerar su destino ayuda a acertar con la elección del estor.

 

¿Pueden las dimensiones de la habitación influir en la compra de estores? La respuesta es sí. Los estilistas y decoradores recomiendan el blanco y los tonos claros en general para estancias de pequeño tamaño, mientras que las grandes y espaciosas aceptan un mayor contraste de colores y estéticas, por supuesto en función de la tapicería, el entarimado, los muebles, los estampados y otros elementos. Con la salvedad de los estilos más eclécticos, la armonía es una cualidad necesaria en la decoración.