Ahorrar lleva tiempo 

No sé vosotros, pero yo estoy empezando a cansarme de pagar más por menos. Es lo que tiene esta inflación que parece ha llegado para quedarse. Si una bolsa de patatas fritas que antes costaba 50 céntimos ahora vale 75 y lleva menos cantidad, pues como que a uno se le queda la cara de tonto. Y cuando la compañía de internet te sube un eurito como si nada la tarifa cada cierto tiempo, pues empiezas a sospechar. Y así con todo. Pero en nuestra mano está que no nos tomen por el pito del sereno, como decía mi madre: el problema es que, para ahorrar, hay que esforzarse, hay que dedicarle tiempo.

Es como el seguro dental. Muchos optamos por un seguro privado con cobertura dental porque consideramos que nos ofrece más garantías y un servicio más cómodo. Por supuesto, a la hora de firmar una póliza, el precio siempre es relevante, pero en mi caso, cuando yo la firmé eran otros tiempos, y el precio fue bastante asequible. Pero me lo han ido subiendo y he mirado otras opciones como oferta adeslas dental. Porque para ahorrar hay que gastar tiempo en mirar… y escuchar.

Por ejemplo, a nadie nos gusta que nos llamen sin nuestro permiso para vendernos cosas. Pero no siempre lo que nos tienen que decir es tan impertinente. Al contrario, no son pocas las veces que son ofertas reales y más que interesantes. Eso es lo que me sucedió a mí cuando un día decidí escuchar. Bien es cierto que también lo hice porque empezaba a estar descontento con mi cobertura dental y tenía ganas de oír otras ofertas. Y así es como comencé a valorar aceptar esta oferta adeslas dental.

Al final, no es cuestión de ahorrar una gran cantidad de dinero con cada gesto. Pero todo suma. Y si echas cuentas verás lo que compensa dedicarle un poco de tiempo a revisar ofertas. Cuando todo sube y los sueldos no lo hacen al mismo nivel, ya se sabe cuál es la consecuencia. En nuestra mano está luchar contra ello con todo lo que tengamos a nuestra disposición.